Vida y Muerte desde una perspectiva elemental y conciencial

"Un verdadero Maestro nunca intenta cambiar a nadie directamente.

Es como una fragancia sutil que te envuelve.

Si estás abierto, algo de ella entrará en ti.

Si no estás abierto, esperará a la puerta.

Ni siquiera llamará porque al hacerlo puede perturbar tu sueño.

Es tu sueño y tienes todo el derecho a dormir cuanto quieras.

No es asunto de nadie el Despertarte".

Osho

Enseñanza "Conectando con el Maestro Interno"

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Multidimensionalidad

Maestros de Paz escribió una nota nueva: ¿Qué es la multidimensionalidad? Mar · La Multidimensionalidad es la propiedad del Espíritu por la cual un mismo ser puede existir simultáneamente en infinidad de planos de existencia, dimensiones o moradas, desarrollando, expandiendo y, de este modo, propulsando con mayor celeridad y eficacia su propia evolución en sus distintas manifestaciones de vida, en cada una de ellas en particular y, a su vez, como un todo en conjunto por medio de las experiencias asumidas en estos distintos niveles de existencia. Cabe, incluso, añadir el detalle de que se pueden transitar por varias vidas, existencias o encarnaciones en una misma dimensión en la misma secuencia de tiempo, con objeto de llegar a abarcar un extenso espectro de lecciones y vivencias de aprendizaje, en todo caso oportunamente asignados, en función del estado evolutivo en el que se encuentre el ser álmico. Esto es lo que se ha venido a denominar en los Mensajes Canalizados la fragmentación de la Fuente Universal de toda Vida, Dios, y, al mismo tiempo, de todas sus criaturas, como medio de evolución aceptado en la Creación por el cual puede abordarse la finalidad pretendida sin llegar, por otro lado, a perder la esencia del propio ser. Esta es, pues, la vía que adoptaron los hijos de Dios para que, una vez producida la separación de ellos de la misma Fuente como entidades individuales, libres y con poder de cocreación, pudieran abrirse a sus propias experiencias y elecciones, adquiriendo, así, por su propia cuenta el entendimiento y la conciencia acerca de la divinidad existente en ellos mismos y en todo lo creado, y contar, de este modo, con el potencial viable de poder siempre redescubrirse a sí mismos y contribuir, de esta forma, a la consumación de una Creación dinámica, siempre en continuo flujo, movimiento y cambio. Comenzaron de ese modo un viaje de experiencia, aprendizaje y evolución que tendría siempre como última meta, de nuevo, la identificación de la Unidad Total con la Fuente Universal, Dios, y con todo lo que es. A la misma vez, se podría indicar que la Fuente, en el desarrollo de este proceso, también experimenta esta fase de redescubrimiento y evolución continua a través de las experiencias en cada uno de sus hijos y criaturas, como esencia vital que subyace en el Espíritu interior de cada ser y que es unificadora de todos los fragmentos y componentes de todo lo existente en el Universo. Atendiendo, pues, a todo lo expuesto, será como, a través de estos fragmentos, átomos del Espíritu en los que un ser multidimensional puede llegar a dividirse, todo cobra un sentido natural e inteligente en cuanto a la existencia del ser en distintas dimensiones, en general de características vibratorias y energéticas distintas, transitando por las experiencias apropiadas y posibles en cada uno de estos planos que le permitan evolucionar, al unísono, en infinidad de facetas y aspectos, estando, a la vez, todas estas particiones conectadas entre sí como fragmentos de un gran cuerpo superior, también llamado Yo Superior o Yo Divino, por lo que los avances obtenidos en ciertas dimensiones pueden acabar revirtiendo y favoreciendo simultánea y automáticamente las experiencias abordadas en otras como efecto y resultado de la conexión existente entre todas las partes del ser. Por tanto, esta condición representa la propiedad del Espíritu que hace viable esta inmensa realidad multidimensional, poder existir en el Aquí y en el Ahora en infinitos planos, sean, incluso, pasados, presentes o futuros, y, así mismo, en cualquier encarnación o existencia llegar a ser Uno y, a la vez, ser un Todo, aunque se cuente con mayor o menor conciencia de ello. Es decir, cualquiera de estas partes, incluso las encarnadas en la 3D, son, a todos los efectos, representaciones auténticas y reales del Yo Superior y, por tanto, de Dios mismo, como Ser Supremo desde donde surge y se rigen toda la vida. El Todo, de este modo, está presente en la parte. Esta es la razón por la cual las canalizaciones reinciden en el mismo concepto planteándolo de distintas maneras. En este proceso de Ascensión Planetaria todos los seres humanos estamos llamados a despertar y recordar el poder y la divinidad que ostentamos por el derecho divino de nuestra propia naturaleza. Subidos, libres y voluntariamente, a esta ola de ascensión dimensional, se comienzan a activar todas estas conexiones cósmicas, divinas y multidimensionales del ser, adquiriéndose conciencia de ellas de un modo u otro, tal y como puede resultar el hecho consumado de integrar capacidades y habilidades no disponibles en un principio en la encarnación actual en la 3D, pero sí logradas en otras encarnaciones o perfectamente depuradas en vidas en otras dimensiones, hasta que, alcanzados ciertos niveles de conciencia y vibración energética en la experiencia evolutiva que se transite en la Tierra, se vuelven directamente accesibles con cierta facilidad y espontaneidad. Por supuesto, también se habilitan y se activan las conexiones con el resto de habitantes y seres de esta dimensión y con toda la Creación en su máxima expresión, como partes integrantes y vivas que somos de un Todo. Así pues, al hilo de lo anterior e insistiendo en el mismo argumento que antes se explicaba, por las características intrínsecas del Espíritu, el Todo es también en las partes y al activar estos lazos de unión multidimensionales surgen, como si hubiesen estado adormecidos, dones y facultades que ya eran manejados con destreza, por ejemplo, en encarnaciones pasadas o que se dominan en dimensiones superiores o en universos paralelos, pasados, presentes o futuros, etc. Seguimos siendo nosotros mismos, pero en la fusión de otras formas de vida, conciencia y existencias nuestras que, sin más, nos son permitidas con cierta disponibilidad por el incremento de la frecuencia vibratoria de nuestra energía al experimentar la ascensión en nosotros. Esta es la verdad del Espíritu que garantiza que en cada encarnación, incluyendo la actual en la Tierra, se tenga una credibilidad total acerca de la autenticidad de todo cuanto ocurre en la realidad que se experimenta, y que, a la vez, puedan estar presentes, conscientes y conectados, en el Aquí y en el Ahora, el resto de fragmentos del Ser Multidimensional o Yo Superior y, por supuesto, de Dios mismo, sin detrimento alguno de la validez y objeto del propio proceso existencial en encarnación en la 3D, aspirándose en ella a ese posible estado de Unidad en el que el espacio no existe como es concebido y percibido por los habitantes de este planeta, y tampoco el tiempo. No llega a ser necesario tener que mirar hacia arriba en el Cielo o hacia abajo en la Tierra buscando o intentando localizar otras partes del ser. Todo es y está cohesionado en el interior de nosotros mismos, y es hallado y activado adquiriendo y expandiendo la conciencia individual que, en gran parte, viene a estar sustentada en la dedicación al reconocimiento e introspección de todo cuanto surge en nosotros y en nuestras vidas, que, en principio, puede parecer que hasta se esté haciendo referencia a mirar hacia el interior, pero que más bien, afinando, se podría asociar al estado de quietud en el que la mente se abre y se silencia, en el que se experimenta que exterior e interior, arriba y abajo están fusionados igualmente y son, al unísono, una misma cosa en el estado del Aquí y del Ahora. Por tanto, Aquí y Ahora somos seres angélicos de Luz tratando de vivir ciertas experiencias que nos hagan alcanzar más expansión de conciencia acerca de la naturaleza y origen divino que atesoramos, cometido que puede ocuparnos un mayor o menor número de vidas de existencia, en función, entre otras cuestiones, de las elecciones y decisiones por las que vayamos optando en nuestro propio proceso que nos hagan ir con mayor o menor rectitud hacia dicho estado evolutivo. Es curioso cómo, a tenor de todo esto, por ejemplo, un árbol cualquiera, ser vivo que acomete de igual modo sus respectivos trances de vida en esta dimensión de 3D, está conectado, por supuesto, con el resto de seres que comparten existencia con él en el planeta, pero también con su propio ser multidimensional al completo y con su correspondiente Yo Superior, cuya esencia y conciencia existencial aparece registrada, a la vez, en todos los átomos de este árbol, en su tronco, en sus ramas, en sus hojas. Por eso, cuando un árbol cambia su aspecto físico y se convierte, como es el caso, en una mesa, una silla o en papel, el propio estado de conciencia vibracional de su Yo Superior continúa vivo y presente a nivel atómico en todas estas nuevas formas y apariencias, y, por tanto, también la esencia misma del Dios Creador. Por este mismo planteamiento, los mensajes y canalizaciones, en algunas ocasiones, se han pronunciado acerca de los trasplantes de órganos, muy en boga actualmente como alternativas y tratamientos en la vanguardia médica según qué dolencias y diagnósticos. Con la práctica de estas actividades se obvia, fundamentalmente por desconocimiento, esta realidad esencial y primordial del ser y, por tanto, la mezcla y el cruce de líneas distintas de linaje ascendente y de conciencia, llevados a cabo con este tipo de actuaciones. Estos linajes cósmicos y existenciales van almacenados y registrados en las células tanto del donante como del paciente, cada uno con su respectiva ascendencia, produciéndose la consiguiente interferencia entre sendos Yo Superiores en un mismo ser humano, que es lo que a la postre puede traducirse y desembocar en el conocido rechazo de órganos que han sido trasplantados o en los diversos efectos secundarios a los que se puede llegar a derivar por la realización de dichos trasplantes, aunque los científicos encuentren otra clase de explicaciones que les resulten válidas por ser visibles a sus ojos. Además de esto, habría que añadir en este asunto que el estado evolutivo del donante, asociado siempre a la frecuencia vibratoria de energía que alcanzó en vida, en consonancia lógicamente con sus hábitos, conductas, acciones y encarnaciones pasadas, van también implícitos en las células de su órgano, y en la vibración energética de este mismo, y huelga decir que, si las frecuencias vibratorias o, lo que es lo mismo, los niveles evolutivos o de conciencia del donante y paciente son dispares o distantes, esto va a provocar efectos de no acoplamiento del trasplante que se vaya a practicar. Por ello, los mismos Mensajes Canalizados, en este tema, abogan en caso de disfunciones y desaplicaciones de órganos por que se avance en otros métodos o soluciones alternativas que suprimieran estas repercusiones y efectos no deseados, ya que ello acabaría acarreando también ciertas compensaciones kármicas, tanto al donante como al receptor, que podrían derivarse por propiciar las, anteriormente mencionadas, interferencias de linaje cósmico y existencial. Extracto de 21 PREGUNTAS LIBRO DE LA AUTOMAESTRIA AUTOR: RAFAEL MONTAÑO CARMONA

Causas Emocionales de la depresión, Angustia, Ansiedad

Maestros de Paz escribió una nota nueva: CAUSAS EMOCIONALES DE LA DEPRESIÓN, ANGUSTIA Y ANSIEDAD.
Mar ·
                             
“El corazón humano pide ayuda a gritos, el alma humana nos implora ser liberada pero no escuchamos su llanto, porque ya no somos capaces ni de oír ni de comprender” 
Khalil Gibran

Los principales síntomas de la depresión son la pérdida de interés y de placer en las actividades habituales, un sentimiento de desesperación o de abatimiento asociado a la fatiga o a una disminución de energía, menor capacidad de concentración, indiferencia, desinterés, desánimo, repliegue sobre sí mismo y rumiación mental. Por lo general, el individuo que la padece no quiere pedir ayuda; prefiere que los demás sean quienes cambien. Duerme mal, incluso con la ayuda de somníferos. Habla poco y tiene tendencia a huir del mundo. Con frecuencia se confunde la depresión con el agotamiento.
La depresión es el medio que una persona utiliza para no sentir presión, sobre todo afectiva. No puede más; ha llegado a su límite. La persona con tendencias depresivas tiene conflictos pendientes de resolver con su progenitor del género contrario. Esto explica que muy a menudo ataque a su cónyuge, en quien establece la transferencia. Lo que esta persona hace sentir a su pareja es lo que hubiera querido hacerle a su padre o a su madre, pero se contuvo. Al rechazar ayuda, la persona depresiva continúa alimentando su rencor o su ira hacia ese padre o esa madre, y se hunde en su dolor.

La gravedad del estado depresivo refleja la intensidad con la que se vivió la herida siendo niño. Las heridas pueden ser las siguientes: rechazo, abandono, humillación, traición o injusticia. Para ocasionar un desequilibrio mental tan grande como la depresión y la psicosis maníaco-depresiva, el dolor tuvo que ser vivido en aislamiento. Esta persona no tuvo con quien hablar en su infancia, alguien que escuchara sus preguntas y sus angustias. Tampoco aprendió a confiar en los demás, bloqueó sus deseos y se replegó finalmente sobre sí misma, mientras aumentaba su sentimiento de rencor o de ira.
En general, la persona depresiva no quiere ayudarse ni pedir ayuda, por lo que quienes la rodean son los que intentan resolver su problema. Si eres uno de ellos, te sugiero que seas muy firme con ella y le digas que nadie en el mundo puede sacarla adelante de manera definitiva, excepto ella misma. Lo más importante es que acepte que su estado depresivo le ocasionó el gran dolor que sufrió su SER en la infancia. Rechaza lo que ES. La herida más común es el rechazo o el miedo a ser rechazada. Esta persona debe admitir que aún cuando haya sido rechazada en la niñez, ello no quiere decir necesariamente que su padre o su madre no la quisieran. El padre que rechaza a su hijo seguramente fue rechazado cuando era niño y todavía se rechaza a sí mismo. Sentir compasión por ese padre y perdonarlo es el inicio del camino hacia la cura. Después, la etapa más importante es perdonarse a sí mismo por haber querido tanto a ese padre. A continuación, lo único que resta es expresarle a ese padre lo que sintió sin ninguna acusación de por medio.

Es muy humano albergar rencor o ira cuando se es niño y se sufre intensamente el aislamiento. Por otro lado, sugiero que esta persona tome la decisión de reconocer su propio valor. Si le resulta difícil, puede pedir a quienes le conocen bien que le digan lo que ven en ella. Por otro lado, si la persona depresiva tiene ideas suicidas, sucede que alguna cosa en ella quiere morir para poder dejar lugar a lo nuevo. Confunde la parte de ella que quiere morir con ella misma.

La depresión implica una profunda tristeza interior, una acumulación de emociones inhibidas provocando un conflicto entre el cuerpo y la mente.

Esta enfermedad está conectada con un suceso señalado de mi vida. La depresión se traduce por desvalorización y culpabilidad que me corroen por dentro. Si soy depresivo, me siento miserable, menos que nada. Vivo en el pasado constantemente y tengo dificultad en salir de él. El presente y el porvenir no existen. Es importante efectuar un cambio ahora en mi modo de ver las cosas porque ya no es como antes.
La depresión frecuentemente es una etapa decisiva en mi vida (por ejemplo: la adolescencia) porque me obliga a volver a cuestionarme. Quiero a toda costa tener una vida diferente. Estoy trastornado entre mis ideales (mis sueños) y lo real (lo que sucede), entre lo que soy y lo que quiero ser. Es un desequilibrio interior (quizás químico y hormonal) y mi individualidad es irreconocible. Me siento limitado en mi espacio y voy perdiendo despacio el sabor de vivir, la esencia de mi existencia. Me siento inútil. En otras palabras, la depresión tiene en su origen una situación que vivo frente a mi territorio, es decir lo que pertenece a mi espacio vital, sean personas (mis padres, mis hijos, mis amigos, etc.) animales (mi perro, mis peces, etc.) o cosas ( mi trabajo, mi casa, mis muebles, etc.). El conflicto que vivo puede estar vinculado a un elemento de mi territorio que tengo miedo de perder: a una pelea que tiene lugar en mi territorio y que me molesta (por ejemplo: las peleas entre hermanos y hermanas). He aquí expresiones que revelan cómo me puedo sentir: “Me ahogas!”, “Me chupas el aire!”; “Aire!”. A veces también, siento dificultad en delimitar o marcar mi espacio, mi territorio: ¿Qué es lo que me pertenece en exclusividad y qué es lo que pertenece a los demás? Las personas depresivas frecuentemente son permeables a su entorno. Siento todo lo que sucede alrededor de mí y esto incrementa mi sensibilidad, de aquí un sentimiento de limitación y la impresión de estar invadido por mi entorno. Así, abandono porque encuentro la carga demasiado pesada, ya no tengo el gusto de vivir y me siento culpable de ser lo que soy. Incluso puedo tener tendencia a la auto – destrucción.

También puedo tener “necesidad de atención” para ayudarme a valorarme; la depresión se vuelve en este momento, un medio inconsciente para “manipular” mi entorno. La risa ya no forma parte de mi vida. Poco importa la razón, compruebo ahora la causa o las causas subyacentes de mi estado depresivo. ¿Viví yo una presión de joven? ¿Cuáles son los acontecimientos señalados vividos en mi infancia que hacen que mi vida parezca tan insignificante? ¿Es la pérdida de un ser amado, mi razón de vivir o la dirección de mi vida que ya no consigo ver?

Huir de la realidad y de mis responsabilidades no sirve de nada (por ejemplo: suicidio) por más que esto parezca ser el camino más fácil. Es importante constatar las responsabilidades de mi vida porque necesitaré otra cosa que antidepresivos para hacer desaparecer la depresión: debo ir a la causa. A partir de ahora, comprendo que soy un ser único. Tengo valores interiores excepcionales. Puedo retomar el control de mí – mismo y de mi vida. Tengo elección de “soltar” o de “luchar”. Tengo todo lo necesario para cambiar mi destino. Responsabilizándome adquiero más libertad y mis esfuerzos están recompensados.

En vez de poner mi atención en “todo lo que no va en mi vida”, tengo interés en dar las GRACIAS por lo que tengo. Debo asumir, hacer proyectos y aceptar que tengo todo el potencial para alcanzar todos los objetivos que me fijo. La alegría y la felicidad podrán entonces tomar aún mucho sitio en mi vida.

DEPRESIÓN Y MANÍA
Conflicto: Depresión (hemisferio derecho) = Conflicto frente al territorio. La pérdida de espacio o la imposibilidad de reproducirme, esto representa la muerte. Fase maníaca (hemisferio izquierdo) = Conflicto con la identidad (delirios de grandeza). Puede haber constelación entre las dos. Las peleas en mi territorio (como podrían ser peleas entre hermanos o en la oficina) por la necesidad de delimitar mi espacio, pueden llevar a un bio o psicoshock que traiga consigo la pérdida del incentivo de vivir.

La depresión se vuelve una solución para manipular mi entorno: Huir de la realidad y de mis responsabilidades puede llevarme a pensar en el suicidio. Ejemplo: Un paciente que se quiere suicidar porque el hijo de la pareja con la que vive es un impresentable. Quiere que se vaya de casa y su padre no le quiere. Se deprime e intenta suicidarse. Vemos que es un conflicto de territorio y que no lo acepto y lo quiero cambiar, pretendiendo que cambien los otros. En la fase maníaca, la agresividad que se puede mostrar, puede ser hacia uno mismo (autoagresión) o hacia los demás. Esta puede ser debida a una pérdida de identidad o a una falta de reconocimiento del grupo. Todos ellos pueden ser vividos como una contrariedad en el territorio.
Sentido biológico: Mantener el territorio y el espacio.

LA ANGUSTIA está caracterizada por un estado de desorientación psíquica en la cual tengo el sentimiento de estar limitado y restringido en mi espacio y sobre todo ahogado en mis deseos. Siento mi espacio limitado por fronteras que, en realidad, no existen. “Estoy cogido” o “Me siento cogido en una trampa”. Estoy de acuerdo con el hecho que la gente invade mi espacio psíquico y esto se manifiesta en mí por una especie de aprieto interior.
Dejo entonces de lado mis necesidades personales para complacer primero a los demás para atraer el amor que necesito (aunque haya otros modos de hacerlo). El aprieto me lleva generalmente a ampliar mis emociones y mi emotividad general en detrimento de un equilibrio adecuado. Ya que vivo en la niebla, la confianza en mí se tambalea, la desesperación y la gana de ya no luchar más se instalan. ¿Cuál puede ser la situación en que me sentí apretado cuando era joven de tal modo que reproduzco aún fielmente hoy este patrón de conducta? (observemos que angustia y claustrofobia son sinónimos por la palabra aprieto.). Es natural por mi cuerpo para colmar mis necesidades psíquicas fundamentales: la necesidad de aire para vivir y respirar, el espacio entre mí y las demás personas, la libertad de decidir y discernir lo que es bueno para mí.

Si, a partir de ahora, contesto a mis esperas frente a la vida en primer lugar, hay muchas probabilidades para que deje las de los demás en su sitio: así, estoy más seguro de estar de acuerdo con ellos! Y sin violar su espacio[1] porque debo recordar que si me siento ahogado, es porque ahogo conscientemente o no a la gente alrededor mío. Se manifiesta la angustia también como una espera inquieta y opresiva, aprensión de “algo” que podría ocurrir, con una tensión difusa, espantosa y generalmente sin nombre. Puede estar vinculada a una amenaza concreta angustiosa (tal como la muerte, catástrofe personal, sanción).

Se trata más de un miedo, generalmente vinculado a nada que sea inmediatamente perceptible o se pueda expresar. Por esto las fuentes profundas de la angustia se encuentran frecuentemente en el niño que fui y se vinculan generalmente con el miedo al abandono, a perder el amor de un ser querido y al sufrimiento. Cuando me encuentro en una situación similar, la angustia vuelve a aflorar. Cada vez que uno de estos miedos reaparece o que se vive una situación imaginaria o realista, esto está captado por mi inconsciente como una señal de alarma: hay peligro! la angustia reaparece aún más fuerte. Cuando soy niño, la angustia se manifiesta frecuentemente por el miedo a la oscuridad y una tendencia a vivir una vida solitaria. A partir de ahora, uso de discernimiento, valor y confianza en la vida para respetarme y dejar ir a los demás a su espacio sin pesar, y borro de mi vida cualquier remordimiento. Así veré “más claro” y adelantaré en la vida con mucho más lucidez.

ANSIEDAD, la otra cara de la depresión. Depresión y ansiedad, distintas manifestaciones de la misma enfermedad. Pensamientos y creencias negativas. Se tiende a proyectar la mente en el futuro, lo que no nos permite vivir el presente. La preocupación y el sufrimiento psicológico, es un camino directo a la enfermedad. La fiebre de la prisa, aumenta la ansiedad.

La ansiedad es un temor sin motivo. La persona que la padece vive en la dolorosa espera de un peligro impreciso e imprevisible.

La ansiedad tiene como efecto en la persona que la sufre el bloqueo de la capacidad de vivir el momento presente. Se preocupa sin cesar. Habla mucho de su pasado, de lo que aprendió, vivió, o de lo que le sucedió a otro. Esta persona tiene una imaginación fértil y pasa mucho tiempo imaginando cosas que ni siquiera es probable que ocurran. Se mantiene al acecho de señales que prueben que tiene razón para preocuparse.

Tan pronto como sientas que entras en una crisis de ansiedad, toma consciencia de que es tu imaginación la que toma el poder, la que te impide disfrutar el momento presente. Decídete a no tener que demostrar nada. Sé tú mismo, con tus errores y cualidades, como todo el mundo. Déjate ir ante lo desconocido, confinado en que tu intuición sabrá guiarte si le das la oportunidad. También puede resultarte benéfico confiar más en las personas que te rodean. Permíteles ayudarte a su manera.

El Amor a ti mismo

El Amor
"El amor es lo único que te puede causar el más grande dolor y la más grande felicidad"
Sólo cuando estás bien contigo mismo, puedes estar bien con los demás. Sólo cuando manejas tu soledad, puedes manejar una relación. Necesitas valorarte para valorar, quererte para querer, respetarte para respetar, y aceptarte para aceptar, ya que nadie puede dar lo que no tiene dentro de sí.
Ninguna relación te dará la paz que tú mismo no crees en tu interior. Ninguna relación te brindará la felicidad que tú mismo no construyas. Sólo podrás ser feliz con otra persona cuando seas capaz de decirle bien convencido: No te necesito para ser feliz. Sólo podrás amar siendo independiente, hasta el punto de no tener que manipular ni manejar a los que dices querer.
Sólo se puede ser feliz cuando dos personas felices se unen para compartir su felicidad, no para hacerse felices la una a la otra. Nadie merece cargar con ese peso en la espalda de la responsabilidad de hacernos felices!
Para amar necesitas una humilde autosuficiencia, necesitas autoestima y la practica de una libertad responsable.
Pretender que otra persona nos haga felices y llene todas nuestras expectativas es una fantasía narcisista que sólo trae frustraciones. Por eso, ámate mucho, madura, y el día que puedas decirle al otro: "Sin ti me la paso bien." Ese día estarás más preparado para vivir en pareja.
Y no te olvides: Enamórate de tu pareja, no te enamores del amor. Pero principalmente enamorate de ti

Mensaje a los Seres de Luz Etapa Final

https://www.youtube.com/watch?v=jhxQ5U7351k&feature=youtube_gdata_player

Mensaje a los Servidores de la Luz

https://www.youtube.com/watch?v=Mo1R7ryOvr0&feature=youtube_gdata_player

Niña sube su vibración

https://www.youtube.com/watch?v=eCAltDxVuhc&feature=youtube_gdata_player

Consagración al Ser Crístico

El verdadero mensajero espiritual siempre presentará la Ley en su estado puro, sin adulterarla con opiniones humanas, sin menospreciar o criticar a otros. Busquen la Luz por el bien de la Luz, y la verdad. Oigan la "pequeña voz interior" y no cometeran errores. Todo lo que uds. Hagan será lo que más les convenga en ese momento de su evolución, si "sueltan" y permiten que la Presencia YO SOY dirija su vida. Que las bendiciones divinas fluyan a través de todos sus esfuerzos por establecer el Reino aquí en la tierra.  Que Dios Los Bendiga.

Hoy te acepto mi amado Ser Crístico
Toma el mando y el control
Hazme como tú, TODO LUZ
Enseñame la docilidad de Tu Sabiduría. Y ayudame a perdonar.
Transmuta la conciencia exterior y su deseo de vivir sólo para mí
De ahora en adelante, déjame yo ser tu victoria porque mi ser inferior ya no vive
SOLO CRISTO VIVE EN MI.

Conny Mendez
Nuevo Pensamiento Nº9 pag.139

Enseñanzas de Sai Baba

Pensamiento del 03 de agosto.
Ustedes comen alimentos todos los días, ¡ingieren miles de granos! ¿Alguna vez han calculado cuántos granos de arroz han consumido? Sin embargo, en el momento en que encuentran una minúscula piedra en el arroz que comen, son muy infelices ese día y se quejan de que su comida tiene piedras. Del mismo modo su vida tiene tres cuartas partes de felicidad y una cuarta parte de tristeza. Pero se convierten en víctimas de la tristeza. Ustedes eligen dar más importancia a la tristeza que a la felicidad. Esta es una cualidad animal (Pashu Lakshanam). Enseñen a su lengua a no perder su reputación siguiendo el camino equivocado. Su lengua es capaz de elevarlos a lo Divino o de hacerlos descender al nivel animal. Si alguien es bueno para ustedes, su lengua lo elogia como a Dios mismo. Si alguien los daña, entonces la lengua lo iguala con un animal. ¡Enseñen a su lengua a cantar siempre el Nombre del Señor y a no criticar nunca a nadie!
Sathya Sai Baba.
(Mis queridos estudiantes - Volumen 5, Capítulo 2 - 9 de marzo de 1993). 

Meditación

La meditación es el fuego - que se quema tus pensamientos, tus deseos, tus recuerdos; se quema el pasado y el futuro. Se quema la mente y el ego. Se quita todo lo que usted piensa que usted es. Es una muerte y un renacimiento, una crucifixión y la resurrección. Has nacido de nuevo. Usted pierde su vieja identidad totalmente, y alcanzas a una nueva visión de la vida. "~ Osho

De Mí Depende La Salvación Del Mundo

De mí depende la salvación del mundo.                 Esta es la afirmación que erradicará de toda mente la arrogancia.  Este es el pensamiento de la verdadera humildad, reconoce que la voluntad de Dios se hace tanto en la tierra como en el cielo y se nos han proporcionado todos los medios para llevarlo a cabo perfectamente. Lo único que se nos pide es que aceptemos nuestro papel con genuina humildad, y que no nos neguemos con un aire de falsa arrogancia que somos dignos de él. Hoy no dejemos de cumplir nuestro cometido con la engañosa excusa de que es un insulto a la modestia. Es el orgullo el que se niega a responder a la Llamada del Propio Dios. Por lo tanto, escucha la Voz de Dios revelarnos lo que desea lo que desea que hagamos. No pongas en duda la capacidad para llevar a cabo la función que Él nos ofrezca. Solo está seguro de que Él conoce tus fuerza, sabiduría y santidad. Y si Él nos considera dignos es porque lo somos. UCDM lección 186 pag 376.

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