Es cuando estas atento a todo lo que está ocurriendo a tu alrededor, obviamente estás en el presente en plena armonía y equilibrio.
Una de las formas de lograr ese estado inicia con amar la mente y aceptar el cuerpo.
En otras ocasiones les he escrito sobre lo importante que es el "NO JUICIO" interno y externo y lo importante que es continuar con esta práctica partiendo desde todos nuestros pensamientos, reconociendo esa parte oscura que también poseemos. Les he dicho que de ahí sale oro y es literal. Así que se hace imperioso aceptar todos los pensamientos que por tu mente pasen, así como los sentimientos que estos generen; Si me auto controlo se hace difícil saber que hay detrás del telón.
Una vez que tienes suficiente tiempo conociéndote tal cual eres sin máscaras, se te hace mucho más fácil ahondar en tí, recuerda el Maestro está en tu interior y está cubierto de lodo, por eso se hace el trabajo interior.
Ahora que es lo que vas a observar
"Tus pensamientos, sentimientos y sensación corporal".
Por ejemplo:
* Cuando estoy preocupado por algo mi sentimiento es ansiedad y mi sensación corporal es tensión estomacal.
* Cuando pienso que he sido agredido u ofendido mi sentimiento es enojo y la sensación corporal es aceleración de la respiración así como el ritmo cardíaco más tensión muscular.
Que nos quiere decir esto que mente, cuerpo y corazón están perfectamente interconectados.
Esta autoobservación de ti mismo sirve para mejorar la inteligencia emocional, ser coherentes, tomar decisiones beneficiosas para usted y el entorno en el que se desenvuelve, ampliar perspectivas.
Solo te estoy diciendo lo que vas a lograr con esta práctica y te diría mentiras si te digo que es algo fácil de realizar. Amerita valor ver y aceptar cosas de ti, se necesita, amor para perdonarte y perdonar, liberarte y liberar, se necesita constancia no es algo de hacer un día, una semana, un mes. Paciencia cuando crees que llegaste y eres toda armonía mañana el péndulo oscila hacia la otra dirección.
Te recomiendo humor mucho humor y fuerza para levantarte todas las veces que sea necesario.
Joslid Salazar
